En la Platja de l'Àliga vuelvo a mis primeros pasos por el GR 92. Hace unos 10 años, la etapa entre l'Ampolla y l'Ametlla fue la primera que recorrí de este GR, cuando aún ni se me había pasado por la cabeza hacerlo entero; y una vez completado, creo que este es el tramo más bonito, sólo comparable a la zona del Cap de Creus. Pero la Costa Daurada se resiste todavía (y que dure) a ser masivamente edificada. Aunque no está libre de construcciones, no tiene nada que ver con las salvajadas urbanísticas que se han llegado a hacer en la Costa Brava, y sólo hay que pasar junto a unos pocos chalets hasta llegar al Port de l'Estany, en la entrada de l'Ametlla
Recargo energías en la Platja de l'Àliga y continúo la ruta...
... que no se va a apartar del mar...
... sino que va subiendo a las rocas y bajando a las calas, siempre cerca del agua. Aquí un ejemplo de cómo NO debe marcarse un sendero (5 señales en 5 árboles distintos, a 10 metros de distancia, como para perderse...)
Paso poco después por L'Illot, un islote entre la Platja y la Punta de l'Àliga
A medida que me acerco a la Punta de l'Àliga se va viendo el Montsià al fondo, detrás de Cap Roig
Más lejos, con otro islote
Desde la Punta de l'Àliga hasta el Cap de Santes Creus, se forma un pequeño golfo. Al fondo la Serra de la Mar
Camino de la Platja de l'Estany Podrit, detrás el Cap de Santes Creus
Platja de l'Estany Podrit
Desde el extremo opuesto; detrás el camino recorrido desde la Punta de l'Àliga
En este tramo de costa, la "tierra firme" está elevada unos metros sobre el nivel del mar; en las salidas de los barrancos se han ido formando las playas. Unos kilómetros más abajo, continúa la misma elevación: se considera que el Delta nace en la Pedrera, a unos 25 km de la salida al mar. En ese punto, todavía se mantiene esa diferencia de nivel, pero donde debería estar el mar, se extiende el Delta del Ebro, formado por los sedimentos depositados por el río durante miles de años. Así que el tramo del GR entre l'Ampolla y Amposta es un auténtico balcón sobre el Delta
El sendero vuelva a ascender al llegar a l'Hidalgo, parece una pequeña urbanización sin asfalto cuyas casas han seguido la arquitectura tradicional de la zona; podrían ser cualquiera de las masías o los trossos cercanos, aún más bonitos si cabe, y no una residencia de vacaciones
Ya llego a doblar el Cap de Santes Creus
Justo antes, la pequeña Platja de la Llenya
La siguiente es la Platja de Santes Creus, donde un brazo de arena separa el mar de la laguna interior, importante reserva natural de la zona
Tras otros cientos de metros entre rocas, agua, matorrales y pinar, la siguiente playa: Port Olivet
Poco a poco aumenta la frecuencia de las edificaciones, señal de que me acerco al final del recorrido. A partir del Port de l'Estany el GR entra prácticamente en zona urbana
Pero antes toca rodear esta delicia natural de la Costa Daurada
Al cruzar el Barranc de l'Estany hay que pisar asfalto unos metros, como alejándose de la costa, para volver a entrar poco después por un callejón. Desde el otro extremo del puerto aparece Cabrafreixet y el Boix a lo lejos
Poco queda ya hasta l'Ametlla, al fondo la Serra de la Mar
A esta hora vuelven los pescadores y las gaviotas se ponen las botas
Finalmente entro al casco urbano de l'Ametlla, pueblo con un sabor marinero como los hay pocos
En l'Ametlla cogí el tren hasta l'Hospitalet de l'Infant, y de ahí un autobús (extrañamente gratuito) me subió a Vandellòs, donde pasaría la noche a la espera de ir a rescatar el coche al día siguiente
