Plantamos las en la Cala del Senyor Ramon, una de las calas naturistas más conocidas de la Costa Brava, aunque ahora lleva una temporada cerrada a causa de unos desprendimientos. Mejor para nosotros, nadie nos vendría a tocar las narices. Por un problema con mi tienda me quedé haciendo vivac, casi mejor que en tienda, sólo que tuve que aguantar un acribillamiento constante por parte de los mosquitos...
El segundo día de ruta fue mucho más ligero, teníamos tiempo de sobras, así que nos lo tomamos con mucha calma. Mejor para mí, ya que al principio me costaba adaptarme al ritmo del grupo; Más de una vez se tuvieron que quedar esperandome. Que curioso, en la montaña me pasa lo mismo...
Cala del Senyor Ramon, donde dormimos. Detrás de las rocas del fondo se esconde Cala Canyet, un poco más urbanizada
Recogimos las tiendas, metimos todo el material en las piraguas...
... y a disfrutar de nuevo de esta maravilla de la naturaleza
Ahora una calita...
...ahora un paso entre rocas...
...ahora una cueva...
Ahora otra más grande... Aunque, parece que no cabe ninguna embarcación grande, verdad?
Pues un barco de los que hacen circuitos turísticos entre los pueblos de la costa se metió dentro estando nosotros, de forma totalmente imprudente. No solo porque no nos dejaba salir en caso de necesidad, sino que además podría haber causado un accidente con 10 piragüistas metidos aquí dentro
Tras lanzar todo tipo de improperios continuamos la ruta. Otra cueva (la verdad es que ahora ya no recuerdo los nombres)
Además de los paisajes, las principales emociones venían al intentar pasar entre las rocas, los escollos... A la que veía algún pedrusco un poco grande, ya me iba hacia allá, como un niño con zapatos nuevos
Aunque normalmente dejaba que pasaran primero los "seniors" para ver si era posible
Poco antes de Tossa entramos a ver un pequeño puerto natural...
...que también tiene una entrada espectacular
Ya me habría quedado a pasear por Tossa... me encanta
Esta vez llegamos con más tiempo, hasta nos tomamos unas birras en la Platja Llorell, y todavía pudimos elegir hotel. En principio ibamos a ir a Cala Morisca, pero al estar llena de escombros y también con varios desprendimientos, retrocedimos hasta Platja Portopi,
Un amanecer aquí... "no hase falta tu me dises nada más"
Esta cala todavía tenía acceso por tierra, un sendero seguía la costa y pasaba por unos túneles hasta llegar aquí. De hecho teníamos vecinos unos metros más arriba... Sólo a primera hora de la mañana apareció algún pescador.
Lo de hoy va a ser un paseo, sólo 14 km.
Una vez recogidos los bártulos, en marcha
Y pese a que se repite el paisaje, no cansa en absoluto
Cerca de Lloret había un tramo de camino de ronda por primera línea de mar, también deber ser interesante hacerlo andando
Más pasos entre rocas
Algunas tienen formas curiosas, la erosión las ha dejado peladas. El grupo reunido esperando a algún rezagado...
Se acerca el final de trayecto: Cala Sant Francesc y el Castell de Sant Joan encima; al otro lado se encuentra Blanes
Pero todavía tenemos tiempo de disfrutar un poco más
Última calita, donde nos hicimos la foto de grupo (que no tengo)
Aunque al principio no sabía cómo iba a responder a tres días de travesía, la verdad es que aguanté como un campeón... Sólo me queda agradecer los consejos, la compañía y el haberme dado esta oportunidad a los compañeros de la sección de kayak de la AEC, así como el buen rollito que reinó en todo momento
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